Durante años Dale Vince y Kathleen Wyatt fueron hippies.
Vivieron de ayudas sociales y viajaron por el mundo. En 1981 se casaron, tuvieron
un hijo y se separaron en 1984, aunque el divorcio no llegaría hasta 1992.
Vince, pobre de solemnidad, se fue a vivir a una caravana
abandonada, pero tuvo el ingenio de crear una turbina para generar electricidad
a partir de materiales reciclados. Aquello fue el germen de una empresa,
Ecotricity, nacida en 1995 y que le hizo millonario. La compañía está valorada
hoy en 90 millones de libras (120 millones de euros).
Sin embargo, cerrar página con Kathleen no sirvió de mucho, porque veintidós años después de divorciarse, ella le reclama parte de su fortuna. En
concreto, le pide 1,9 millones de libras para comprar una casa, ya que
actualmente vive casi en la pobreza en una vivienda social.
La mujer llevó a su ex-marido a los tribunales en 2011. La
solicitud fue rechazada en primera instancia, pero hace pocos dias se supo que la Corte
Suprema británica ha aceptado revisar el caso, que ahora será llevado a un
tribunal de familias. Un juez escuchará la petición y decidirá qué suma
corresponde a la ex. "Una decisión de locos» ha asegurado el empresario, que con esta decisión parece que se pueden abrir decenas de casos similares de parejas que
tuvieron una relación breve 25 años atrás.
El caso de Vince confirma la creencia popular de que Londres
es el mejor lugar del mundo para divorciarse..... si la demandante es una mujer. Pare que, en general, los jueces suelen tomar partido por la parte de la pareja que queda
más desfavorecida.
Seguro que Vince estará ahora pensando que era más feliz siendo hippy
Si es millonario, no entiendo el problema de una par de millones mas o menos, además sería también para su hijo.
ResponderEliminarUn abrazo.