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martes, 16 de abril de 2013

Las muertes más absurdas de la historia


Muchos personajes famosos han perdido la vida en condiciones y situaciones tan extrañas como inverosímiles. Esta es una selección de algunas de las mas absurdas:

- Enrique I de Castilla: murió de una pedrada jugando con sus amigos, con solo 13 años.

- Arquímedes: un soldado romano le atravesó con su espada al ser recriminado insistentemente por el sabio griego para que no pisara unos dibujos científicos que había hecho en la playa.

- Jean Baptiste Lully, compositor francés: falleció por una gangrena al clavarse la batuta en el pie.


- Alejandro I de Grecia: su mascota, un mono, le propinó un mordisco y le contagió la rabia.

- Francis Bacon, filósofo y escritor inglés: falleció de frio mientras rellenaba con nieve de las montañas el interior del cuerpo de una gallina muerta, para un experimento en el queria comprobar que el frio retrasaba la descomposición de los cadáveres.



- Agatocles, tirano de Siracusa: se atragantó con un palillo.

- Esquilo, dramaturgo griego: murió golpeado por una tortuga que se desprendió de las garras de un águila que sobrevolaba su cabeza.

- Grigori Rasputin, místico ruso: fue primero envenenado con suficiente cianuro como para matar a diez hombres, pero eso no lo afectó. Entonces sus asesinos le dispararon por la espalda con un revólver. Rasputín revivió poco después. Le dispararon tres veces más, pero Rasputín seguía vivo. Así que entonces fue molido a palos, y por las dudas arrojado a las aguas heladas del río Neva.



- Isidora Duncan, bailarina estadounidense: murió por una fractura en las cervicales, debida a que su echarpe se enganchó en las ruedas del coche en el que acbaba de subir.

- Maximiliano de Austria (padre de Felipe el Hermoso): una indigestión de melones le quitó la vida. Por cierto, como era un rey muy previsor, fue enterrado en un ataúd que siempre llevaba consigo.



- Allan Pinkerton, fundador de la agencia americana de detectives que lleva su nombre: murió por una gangrena tras morderse la lengua.

- Tennessee Williams, dramaturgo: murió en su baño cuando, tratando de abrir con la boca un bote de pastillas, el tapón finalmente salió disparado hacia su garganta y lo asfixió.


- Magallanes, navegante: habiendo pasado lo más dificil y surcado los mares desconocidos,  se metió por medio en un sencillo ajuste de cuentas entre dos tribus indígenas y ahí acabó sus dias.

- Atila, caudillo de los hunos: estaba tan borracho en su noche de bodas que no se percató de que sangraba profusamente por la nariz. Al dia siguiente amaneció ahogado en su propia sangre.

- Federico I Barbarroja: tras cabalgar por el desierto embutido en su pesada armadura, se sintió tan excitado cuando llegó al rio Saleph, que se lanzó a sus aguas para apagar la sed. Desafortunadamente, olvidó quitarse la armadura y se hundió como un yunque.


- Jack Daniel, famoso destilador de whisky: un dia quiso abrir su caja fuerte, sin recordar la combinación. Enfurecido, Daniel pateó la caja fuerte y se lastimó el dedo gordo, que terminó desarrollando una infección por la que murió.

- Felix Faure, presidente de Francia: murió de un ataque al corazón cuando estaba en su despacho  del Elíseo con su amante Margerite Steinhel en plena acción amatoria. Las cronicas de la época relataron que el motivo fue un ataque cardiovascular que padeció justo cuando su amante le estaba practicando una felación.


- Antonio Gaudí, arquitecto: murió atropellado por un tranvia que circulaba a una velocidad más bien ridícula.

- El general Paton: este impetuoso general americano cuyos tanques habían librado a Europa de los invasores nazis, y que había escapado a los ataques de los panzers mientras llevaba sus tropas de Sicilia a Elba, murió en un accidente de coche en el que no respetó la prioridad, con la guerra apenas acabada (1945).

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